viernes, 19 de abril de 2013

“EE.UU. necesita una nueva guerra, de lo contrario el capitalismo morirá”

La lucha contra el cambio climático puede causar una crisis sin precedentes.

La ONU insta a poner fin a los asesinatos y torturas de niños en Siria

Cierran el círculo en torno al comportamiento cuántico de los fotones





“EE.UU. necesita una nueva guerra, de lo contrario el capitalismo morirá”   

Las guerras estimulan la economía y EE.UU. es una nación guerrera. Así lo afirma el columnista y analista financiero Paul Farrell.
“Con el fin de las guerras de Afganistán e Irak, el capitalismo necesita un estímulo económico: una nueva guerra”, subraya el columnista del portal financiero estadounidense Market Watch.

“¿No nos sacó la Segunda Guerra Mundial de la Gran Depresión?”, plantea Farrell, quien afirma también que las guerras de Irak y Afganistán estimularon en su momento la economía.

Según la publicación, la "máquina de guerra del Pentágono" duplicó el valor de su actividad de 260.000 millones dólares en el año 2000 a cerca de 550.000 millones de dólares el año pasado. Asimismo, recuerda que la deuda federal pasó de 5 a 15 billones de dólares en los últimos 12 años.

Sin embargo, Farrell destaca que las guerras benefician sobre todo a los capitalistas. De hecho, la lista de Forbes de multimillonarios del mundo se disparó de 322 en 2000 a 1.426 en su edición más reciente. El 31% de estos multimillonarios son de EE.UU. 

Los políticos en Washington siguen en conflicto sobre los recortes en el gasto público, que en gran medida afectan al presupuesto militar. Es más, los gastos en defensa se redujeron un 22,2%, lo que supone la mayor caída desde la guerra de Vietnam en 1972. Algunos políticos aplauden la iniciativa, pero el recorte en el sector militar preocupa, entre otros, a los neoconservadores y políticos dependientes de contratistas de defensa, afirma el artículo.

“Los neoconservadores sostienen que una nueva guerra aumentaría el PIB. Deben de estar rezando para que Corea del Norte les dé una excusa”, afirma el columnista financiero.
 
 
 

La lucha contra el cambio climático puede causar una crisis sin precedentes.    

El mundo se dirige hacia una crisis económica sin precedentes, pues los mercados de valores están inflando una burbuja de inversión en hidrocarburos por valor de miles de millones de dólares, según algunos expertos.
La llamada ‘burbuja del carbón’ es el resultado de una sobrevaloración de las reservas de petróleo, carbón y gas en manos de las compañías de combustibles fósiles.

De acuerdo con un informe de Nicholas Stern, profesor de la London School of Economics, al menos dos tercios de estas reservas deberán permanecer bajo tierra sin ser explotadas, si se quiere cumplir los objetivos existentes acordados a nivel internacional para evitar cruzar el umbral de un cambio climático "peligroso".

Esto hará que el valor de estas reservas disminuya drásticamente, provocando pérdidas masivas a nivel global, recoge la publicación. Sin embargo, los mercados de valores están apostando por la inacción de los países en materia de cambio climático, denuncian los expertos.

Según Stern, las 200 principales compañías de hidrocarburos se gastaron 674.000 millones de dólares en 2012 para encontrar y explotar nuevos recursos, una suma equivalente al 1% del PIB mundial, que podría terminar como activos bloqueados o sin valor.

El informe calcula que las reservas actuales mundiales de combustibles fósiles equivalen a 2.860 toneladas de dióxido de carbono, pero que sólo se podrá quemar el 38% de ellas si se quiere tener un 50% de posibilidades de mantener por debajo de 2º centígrados el aumento de la temperatura global. Para tener un 80% de posibilidades, sólo podrán quemarse el 31% de las reservas.

"Es impresionante ver las cifras del informe, son mucho peores de lo que la gente piensa. El riesgo es enorme”, declaró  Peers Jens, director de una compañía europea que gestiona activos por valor de 4.000 millones de euros, añadiendo que el momento clave vendrá en 2015, fecha en la que los Gobiernos del mundo se comprometieron a alcanzar un acuerdo global para limitar las emisiones de carbono. “Tenemos que actuar ya. Si esperamos al año 2015 será demasiado tarde para tomar medidas", afirmó.
 
  

La ONU insta a poner fin a los asesinatos y torturas de niños en Siria

La ONU tildó la situación actual en Siria de "catástrofe humanitaria" e instó a poner fin a las torturas y asesinatos de niños en el conflicto, que ya se ha cobrado la vida de más de 70.000 personas.
En una reunión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas sobre el conflicto sirio, la subsecretaria general de la ONU para Asuntos Humanitarios, Valerie Amos, reveló que actualmente 6,8 millones de sirios precisan de ayuda humanitaria y destacó que "la gente que se encuentra en las zonas controladas por la oposición está en la necesidad más urgente".

"La situación en Siria es una catástrofe humanitaria. Los civiles pagan un precio muy elevado por nuestra incapacidad de poner fin al conflicto", afirmó Amos e insistió en “adoptar las acciones necesarias para acabar con la violencia” en el país. 

Amos también señaló que los niños sirios son los que más sufren por el conflicto. "Los niños han sido asesinados, torturados y sometidos a violencia sexual. Muchos de ellos no tienen suficientes alimentos”, indicó la subsecretaria general de la ONU para Asuntos Humanitarios. Por ello, según agregó, “este conflicto no solo está minando al país actual, sino que también está destruyendo su futuro". 

Amos especificó que numerosos obstáculos burocráticos dificultan la distribución de la ayuda humanitaria en el país, además de los frecuentes ataques contra los convoyes de ayuda internacional.

El embajador de Siria ante la ONU, Bashar Jafari, a su vez, responsabiliza al terrorismo y a las sanciones impuestas por Occidente de la situación humanitaria crítica en la que se encuentra su pueblo y también acusó a los países vecinos de impedir el regreso de los refugiados a Siria.

Todo sobre este tema



Texto completo en: http://actualidad.rt.com/actualidad/view/92203-onu-ninos-conflicto-siria-catastrofe-humanitaria
 
 
 

Cierran el círculo en torno al comportamiento cuántico de los fotones

Un experimento podría demostrar que las rarezas de estas partículas no son una excepción ni tampoco fruto de fallos en los instrumentos de medida

Un equipo de investigadores vieneses ha cerrado más el círculo en torno al comportamiento cuántico, contrario a la intuición, de partículas cuánticas como los fotones. En general, existe la duda de si las partículas cuánticas se comportan siempre de manera “extraña” o, simplemente, sus comportamientos reflejan carencias de los instrumentos de medida. Mediante una experimentación profunda del entrelazamiento cuántico de los fotones, los científicos consiguieron detectarlos a todos, aunque haciendo varios experimentos. Ahora solo falta el experimento definitivo, el que de una sola vez los detecte a todos… comportándose de manera cuántica.



Laboratorio IQOQI. Imagen: Jacqueline Godany. Fuente:
Laboratorio IQOQI. Imagen: Jacqueline Godany. Fuente:
Un equipo de la Universidad de Viena (Austria), dirigido por el físico austriaco Anton Zeilinger, ha llevado a cabo un experimento con fotones, con el que han cerrado una laguna importante.
Los investigadores han conseguido con él la prueba experimental más completa de que el mundo cuántico está en conflicto con nuestra experiencia cotidiana. Los resultados de este estudio se publican esta semana en la revista Nature.
Cuando se observa un objeto, se hacen una serie de suposiciones intuitivas, entre ellas que las propiedades únicas del objeto han sido determinadas antes de la observación y que estas propiedades son independientes del estado de otros objetos, distantes. En la vida cotidiana, estas suposiciones están plenamente justificadas, pero las cosas son diferentes a nivel cuántico.
En los últimos 30 años, varios experimentos han demostrado que el comportamiento de las partículas cuánticas -tales como átomos, electrones o fotones- puede estar en conflicto con nuestra intuición básica. Sin embargo, estos experimentos nunca han conseguido respuestas definitivas.
Hasta ahora, todos los experimentos han dejado abierta la posibilidad, al menos en principio, de que las partículas observadas “aprovecharan” una debilidad del sistema experimental.
La física cuántica es una herramienta exquisitamente precisa para comprender el mundo que nos rodea a un nivel muy fundamental. Al mismo tiempo, es una base para la tecnología moderna: semiconductores (y por lo tanto, ordenadores), láseres, escáneres de resonancia magnética, y otros numerosos dispositivos se basan en efectos físicos cuánticos.
Sin embargo, incluso después de más de un siglo de intensa investigación, los aspectos fundamentales de la teoría cuántica no son del todo claros. De manera regular, laboratorios de todo el mundo han obtenido resultados que parecen en contradicción con nuestra intuición cotidiana, pero que se pueden explicar en el marco de la teoría cuántica.
El entrelazamiento cuántico
Los resultados de los físicos de Viena no reflejan un efecto nuevo, sino una profunda investigación en uno de los fenómenos más fundamentales de la física cuántica, conocido como “entrelazamiento” (entanglement). El efecto del entrelazamiento cuántico es increíble: al medir un objeto cuántico que tiene una pareja “entrelazada”, el estado de la partícula 1 depende de las mediciones realizadas en su pareja.
La teoría cuántica describe el enredo como independiente de cualquier separación física entre las partículas. Es decir, el entrelazamiento también puede ser observado cuando las dos partículas están lo suficientemente separadas la una de la otra de modo que no pueden intercambiar información entre ellas (la velocidad de comunicación está fundamentalmente limitada por la velocidad de la luz). Probar tales predicciones con respecto a las correlaciones entre las partículas cuánticas entrelazadas es, sin embargo, un reto experimental importante.
Hacia una respuesta definitiva
Los jóvenes universitarios del grupo de Anton Zeilinger, entre ellos Marissa Giustina, Alexandra Mech, Rupert Ursin, Sven Ramelow y Bernhard Wittmann, en una colaboración internacional con el Instituto Nacional de Estándares y Tecnología/NIST (EE.UU.), el Physikalisch-Technische Bundesanstalt (Alemania), y el Instituto de Óptica Cuántica Max Planck (Alemania), han dado un importante paso hacia la obtención de pruebas definitivas experimentales de que las partículas cuánticas sí pueden hacer cosas que la física clásica no permite que ellos hagan.
Para su experimento, el equipo construyó una de las mejores fuentes de pares de fotones entrelazados en todo el mundo y empleó detectores de fotones de alta eficiencia diseñados por expertos del NIST.
Estos avances tecnológicos junto con un protocolo de medición adecuado permitieron a los investigadores detectar fotones entrelazados con una eficiencia sin precedentes. En pocas palabras: “Nuestros fotones ya no pueden escabullirse de ser medidos”, afirma Zeilinger en la nota de prensa de la Universidad de Viena.
Un último paso
Aunque el nuevo experimento hace que los fotones sean las primeras partículas cuánticas para las cuales, en varios experimentos separados, se han cerrado todas las escapatorias posibles, aún falta el broche de oro, es decir, un experimento individual en el que se les cierren dichas escapatorias.
Tal experimento también sería de importancia fundamental para una aplicación práctica importante: la ‘criptografía cuántica’, que se basa en principios mecánicos cuánticos y se considera que es totalmente segura contra las escuchas. El espionaje es aún, sin embargo, teóricamente posible, dado que sigue habiendo lagunas. Sólo cuando todas estos están cerradas será posible un intercambio completamente seguro de mensajes.
Un experimento sin lagunas, dice Zeilinger, “es un gran reto, que atrae a grupos de todo el mundo.” Estos experimentos no se limitan a los fotones, sino que también incluyen a los átomos, electrones, y otros sistemas que muestran un comportamiento mecánico cuántico. El experimento de los físicos austriacos destaca el potencial de los fotones.
Gracias a estos últimos avances, el fotón se está quedando sin lugares donde esconderse, y los físicos cuánticos están más cerca que nunca de la prueba experimental concluyente de que la física cuántica desafía nuestra intuición y la experiencia cotidiana en la medida sugerida por la investigación de las últimas décadas.