Oposición siria crea
comité para dirigir ofensiva armada contra Al Assad
IRÁN Y AFGANISTÁN, VECINOS DE FRONTERA… ¿Y
DE TRINCHERA?
Rusia advierte uso del Consejo de Seguridad
de la ONU para derrocar gobiernos
La hiperactividad en el cerebro podría explicar los
síntomas de la depresión
La depresión nos hace olvidadizos
OJO POR OJO: GENERAL IRANÍ PROPONE QUEMAR LA CASA BLANCA
Última actualización: 27 feb 2012 | 19:26 MSK
Un general iraní propuso quemar la Casa Blanca en Washington y colgar a los militares estadounidenses como respuesta a laquema de ejemplares del Corán hecha en Afganistán la semana pasada. “Sólo la quema de la Casa Blanca puede aliviar la herida”, subrayó el alto mando castrense.
“El mundo debe saber que EE. UU. está en contra del Islam”
El general iraní de brigada Mohammad Reza Nakdi propuso la que considera una “respuesta ideal”, luego de que soldados estadounidenses quemaran ejemplares del Corán en la baseaérea de la OTAN en Bagram, a 50 kilómetros al norte de la capital afgana Kabul.
Reza Nakdi planteó trambién ahorcar a los soldados involucrados en la ofensa contra el libro sagrado de los musulmanes, informó este lunes la cadena de televisión panárabe Al Arabiya.
El general comanda la Milicia iraní Basij, que son brigadas de voluntarios iraníes islámicos, y aseguró que “sólo la quema de la Casa Blanca y la horca para todos los involucrados podría vengar y cicatrizar la herida que nos ha causado a los musulmanes la quema del Corán”.
Además, el Ayatolá Ahmad Jatami opinó que las tropas de Estados Unidos quemaron las copias deliberadamente, no por error. “Estas disculpas son falsas. El mundo debe saber que Estados Unidos está en contra del Islam”, manifestó el clérigo iraní. “No fue un error. Fue un movimiento intencional, hecho a propósito”, agregó Jatami.
“La inmediata retirada de las tropas”
Asimismo, el Ministerio de Exteriores de Irán condenó en un comunicado especial el acto perpetrado por soldados estadounidenses desplegados en Afganistán. La Cancillería de la República Islámica iraní acusó de 'barbarie' a los soldados estadounidenses en hizo hincapié en que la quema del Corán evidencia la sistemática violación de derechos humanos y los derechos de la nación musulmana de Afganistán por los estadounidenses, misma que proviene de la comprensión errónea de las creencias y de la cultura religiosa de los musulmanes de la región y del mundo, así como de la ocupación de este país y la negligencia de las fuerzas ocupantes.
Teherán exigió también la salida de las fuerzas extranjeras del territorio afgano. “La República Islámica de Irán considera la inmediata retirada de las tropas foráneas del territorio afgano como la única alternativa para que la paz, la seguridad y la estabilidad retornen a Afganistán”, indicó el comunicado.
Nuevas protestas y nuevas víctimas
Mientras tanto, en Afganistán se reanudaron las protestas contra la quema del Corán. Este domingo, en la provincia de Kunduz, a 250 kilómetros al norte de Kabul, nuevas protestas por quema de Corán dejaron nuevas víctimas: una persona murió y más de 20 quedaron heridas, según las fuentes policiales.
“Un civil murió, mientras que 15 policías, siete instructores estadounidenses de la policía y tres civiles más resultaron heridos en el distrito Imam Sahib", informó el jefe de la policía de Kunduz, Samihullah Katra.
En total, 30 personas murieron y unas 200 quedaron heridas desde el martes pasado a causa de las manifestaciones organizadas en diferentes ciudades de Afganistán, dijo este lunes el presidente afgano Hamid Karzai en un mensaje televisivo por el sexto día de protestas. "Hemos pedido a las fuerzas de seguridad que tengan cuidado”, agregó.
Karzai advirtió que es hora de poner fin a las violentas protestas contra la quema del Corán y regresar a la estabilidad en Afganistán. El presidente reiteró su enérgica condena a la destrucción del libro sagrado islámico, pero insistió en su llamado a "recuperar la calma y preservar la tranquilidad" para evitar más protestas violentas.
Oposición siria crea comité para dirigir ofensiva armada contra Al Assad
El líder de la oposición siria, Burhan Galiun, hizo pública este jueves la creación de un llamado “comité militar” que dirigirá la ofensiva rebelde contra el Gobierno de Bashar Al Assad, y pidió armas a los países que la quieran acompañar.
En una conferencia de prensa realizada en París, Galiun dijo que el grupo estará compuesto de oficiales y civiles y entre sus tareas está el "seguimiento de cuestiones de competencia militar, la organización de sus rangos, estudio de necesidades y gestión de sus fondos y operaciones".
Precisó que el comité estará ubicado “probablemente en Turquía” y tendrá por misión “ver cuáles armas son necesarias y para cuáles misiones".
El anuncio se hace un día después del llamado del Primer Ministro de Qatar, Hamed ben Jasem al Thani, para que la comunidad internacional suministre armas a la oposición y combatir al Gobierno de Al Assad.
"Deberíamos hacer todo lo necesario para ayudar a los opositores, incluido entregarles armas para que puedan defenderse", dijo el miércoles Al Thani.
Tras esto, el líder de la oposición siria reveló que son varios los países que quieren armar a los rebeldes y prometió organizar ese suministro para evitar que llegue sin pasar por el llamado comité.
"Sabemos que hay países que han manifestado su deseo de armar a los revolucionarios. El CNS, a través del buró militar, ha querido organizar este flujo para evitar entregas directas provenientes de países particulares", dijo Galium que prometió que las armas vayan “a entrar a Siria sin control”.
Este jueves el Gobierno sirio rechazó el llamado hecho por Qatar para que la comunidad internacional suministre armas a la oposición.
En una conferencia de prensa, el portavoz del Ministerio de Exteriores y Emigrantes sirio, Yihad Makdisi, expresó que lo declarado por el primer ministro de Qatar confirma lo que Damasco había denunciado desde el inicio de la crisis: “Existe un suministro de armas a la oposición”.
Para el Gobierno tales declaraciones “constituyen un acto de hostilidad contra Damasco”, y responsabiliza a cualquier parte que realice declaraciones semejantes “por el derramamiento de sangre siria”, según lo informa la Agencia estatal Sana.
teleSUR-Afp-Efe/PR
IRÁN Y AFGANISTÁN, VECINOS DE FRONTERA… ¿Y DE TRINCHERA?
Rusia advierte uso del Consejo de Seguridad de la ONU para derrocar gobiernos
Rusia denunció este jueves que el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU) no debe ser utilizado como una plataforma para cambiar regímenes políticos, al advertir que así pretenden intervenir en Siria.
El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, calificó las propuestas de resoluciones llevadas ante la ONU por los países occidentales y árabes como "absolutamente inaceptables, ya que pretenden convertir el Consejo de Seguridad en una plataforma para sellar documentos sobre cambios de regímenes en países soberanos".
En tal sentido, reiteró que Moscú no cambiará su postura sobre Siria en el Consejo de Seguridad.
"Precisamente estas actuaciones, y no el derecho al veto, derivan en la deslegitimación del trabajo del Consejo y la merma de su prestigio internacional, y son capaces en última instancia de transformar todo el sistema contemporáneo de mantenimiento de la paz y seguridad basado en el respeto del Estatuto de la ONU", dijo.
Insistió en que las resoluciones vetadas por Rusia "se basaban en (...) la responsabilidad exclusiva del Gobierno sirio por la escalada de la violencia y en dar un ultimátum al Ejecutivo de (el presidente sirio, Bashar Al) Assad".
Lavrov afirmó que los socios extranjeros de Rusia no están listos para trabajar codo con codo con Moscú en la resolución del conflicto sirio y situó algunos de sus planteamientos "fuera del campo del derecho internacional".
"Da la impresión de que están atrapados por un esquema artificial basado en valoraciones erróneas de lo que sucede en Siria. De allí sus planteamientos, a menudo fuera del campo del derecho internacional. Les recomendaría buscar allí las causas de los errores, y no en el 'juego sucio' de Rusia y China", reclamó.
Asimismo, el Canciller negó que Moscú esté defendiendo a capa y espada el Gobierno del presidente sirio.
"No defendemos el régimen, sino la justicia, el derecho soberano del pueblo sirio a elegir aquel gobierno que le satisfaga, de acuerdo a los principios básicos del Estatuto de la ONU y del derecho internacional", argumentó.
Serguéi Lavrov advirtió que una intervención militar en Siria o el respaldo a una sola de las partes involucradas en la crisis, sólo agravaría el conflicto.
"Si los acontecimientos toman la senda militar no significará el ocaso del derecho internacional, sino una flagrante violación de sus principios básicos. No sería, sin embargo, el primero ni probablemente el último desafío a la firmeza de la legalidad que se ha establecido en el mundo", lamentó.
Las declaraciones el Canciller ruso se dan en momentos en que el Consejo de Seguridad exigió a Siria permitir de manera inmediata el acceso de las organizaciones humanitarias a las ciudades afectadas por la violencia en el país, iniciativa que fue respaldada por Rusia y China.
El carácter humanitario de esta nueva propuesta contó con el apoyo de los dos miembros de la instancia internacional, que han negado varias iniciativas orientadas a responsabilizar al gobierno de Al Assad por la escalada de violencia.
En un comunicado, el Consejo de Seguridad pidió a las autoridades sirias "autorizar un acceso libre, total e inmediato del personal humanitario a todas las poblaciones que necesitan ser rescatadas".
El Consejo "deplora la situación humanitaria que se agrava rápidamente" en Siria, especialmente "en las regiones afectadas por los combates y la violencia como Homs, Hama, Dera e Idlib".
El Consejo también pide "a todas las partes involucradas en Siria, y en particular a las autoridades sirias, cooperar plenamente con Naciones Unidas y con las organizaciones humanitarias pertinentes para facilitar el suministro de ayuda humanitaria y permitir la evacuación de heridos de zonas afectadas" por la violencia.
teleSUR-EFE-AFP-19Digital/a
Rusia advierte uso del Consejo de Seguridad de la ONU para derrocar gobiernos
Rusia denunció este jueves que el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU) no debe ser utilizado como una plataforma para cambiar regímenes políticos, al advertir que así pretenden intervenir en Siria.
El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, calificó las propuestas de resoluciones llevadas ante la ONU por los países occidentales y árabes como "absolutamente inaceptables, ya que pretenden convertir el Consejo de Seguridad en una plataforma para sellar documentos sobre cambios de regímenes en países soberanos".
En tal sentido, reiteró que Moscú no cambiará su postura sobre Siria en el Consejo de Seguridad.
"Precisamente estas actuaciones, y no el derecho al veto, derivan en la deslegitimación del trabajo del Consejo y la merma de su prestigio internacional, y son capaces en última instancia de transformar todo el sistema contemporáneo de mantenimiento de la paz y seguridad basado en el respeto del Estatuto de la ONU", dijo.
Insistió en que las resoluciones vetadas por Rusia "se basaban en (...) la responsabilidad exclusiva del Gobierno sirio por la escalada de la violencia y en dar un ultimátum al Ejecutivo de (el presidente sirio, Bashar Al) Assad".
Lavrov afirmó que los socios extranjeros de Rusia no están listos para trabajar codo con codo con Moscú en la resolución del conflicto sirio y situó algunos de sus planteamientos "fuera del campo del derecho internacional".
"Da la impresión de que están atrapados por un esquema artificial basado en valoraciones erróneas de lo que sucede en Siria. De allí sus planteamientos, a menudo fuera del campo del derecho internacional. Les recomendaría buscar allí las causas de los errores, y no en el 'juego sucio' de Rusia y China", reclamó.
Asimismo, el Canciller negó que Moscú esté defendiendo a capa y espada el Gobierno del presidente sirio.
"No defendemos el régimen, sino la justicia, el derecho soberano del pueblo sirio a elegir aquel gobierno que le satisfaga, de acuerdo a los principios básicos del Estatuto de la ONU y del derecho internacional", argumentó.
Serguéi Lavrov advirtió que una intervención militar en Siria o el respaldo a una sola de las partes involucradas en la crisis, sólo agravaría el conflicto.
"Si los acontecimientos toman la senda militar no significará el ocaso del derecho internacional, sino una flagrante violación de sus principios básicos. No sería, sin embargo, el primero ni probablemente el último desafío a la firmeza de la legalidad que se ha establecido en el mundo", lamentó.
Las declaraciones el Canciller ruso se dan en momentos en que el Consejo de Seguridad exigió a Siria permitir de manera inmediata el acceso de las organizaciones humanitarias a las ciudades afectadas por la violencia en el país, iniciativa que fue respaldada por Rusia y China.
El carácter humanitario de esta nueva propuesta contó con el apoyo de los dos miembros de la instancia internacional, que han negado varias iniciativas orientadas a responsabilizar al gobierno de Al Assad por la escalada de violencia.
En un comunicado, el Consejo de Seguridad pidió a las autoridades sirias "autorizar un acceso libre, total e inmediato del personal humanitario a todas las poblaciones que necesitan ser rescatadas".
El Consejo "deplora la situación humanitaria que se agrava rápidamente" en Siria, especialmente "en las regiones afectadas por los combates y la violencia como Homs, Hama, Dera e Idlib".
El Consejo también pide "a todas las partes involucradas en Siria, y en particular a las autoridades sirias, cooperar plenamente con Naciones Unidas y con las organizaciones humanitarias pertinentes para facilitar el suministro de ayuda humanitaria y permitir la evacuación de heridos de zonas afectadas" por la violencia.
El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, calificó las propuestas de resoluciones llevadas ante la ONU por los países occidentales y árabes como "absolutamente inaceptables, ya que pretenden convertir el Consejo de Seguridad en una plataforma para sellar documentos sobre cambios de regímenes en países soberanos".
En tal sentido, reiteró que Moscú no cambiará su postura sobre Siria en el Consejo de Seguridad.
"Precisamente estas actuaciones, y no el derecho al veto, derivan en la deslegitimación del trabajo del Consejo y la merma de su prestigio internacional, y son capaces en última instancia de transformar todo el sistema contemporáneo de mantenimiento de la paz y seguridad basado en el respeto del Estatuto de la ONU", dijo.
Insistió en que las resoluciones vetadas por Rusia "se basaban en (...) la responsabilidad exclusiva del Gobierno sirio por la escalada de la violencia y en dar un ultimátum al Ejecutivo de (el presidente sirio, Bashar Al) Assad".
Lavrov afirmó que los socios extranjeros de Rusia no están listos para trabajar codo con codo con Moscú en la resolución del conflicto sirio y situó algunos de sus planteamientos "fuera del campo del derecho internacional".
"Da la impresión de que están atrapados por un esquema artificial basado en valoraciones erróneas de lo que sucede en Siria. De allí sus planteamientos, a menudo fuera del campo del derecho internacional. Les recomendaría buscar allí las causas de los errores, y no en el 'juego sucio' de Rusia y China", reclamó.
Asimismo, el Canciller negó que Moscú esté defendiendo a capa y espada el Gobierno del presidente sirio.
"No defendemos el régimen, sino la justicia, el derecho soberano del pueblo sirio a elegir aquel gobierno que le satisfaga, de acuerdo a los principios básicos del Estatuto de la ONU y del derecho internacional", argumentó.
Serguéi Lavrov advirtió que una intervención militar en Siria o el respaldo a una sola de las partes involucradas en la crisis, sólo agravaría el conflicto.
"Si los acontecimientos toman la senda militar no significará el ocaso del derecho internacional, sino una flagrante violación de sus principios básicos. No sería, sin embargo, el primero ni probablemente el último desafío a la firmeza de la legalidad que se ha establecido en el mundo", lamentó.
Las declaraciones el Canciller ruso se dan en momentos en que el Consejo de Seguridad exigió a Siria permitir de manera inmediata el acceso de las organizaciones humanitarias a las ciudades afectadas por la violencia en el país, iniciativa que fue respaldada por Rusia y China.
El carácter humanitario de esta nueva propuesta contó con el apoyo de los dos miembros de la instancia internacional, que han negado varias iniciativas orientadas a responsabilizar al gobierno de Al Assad por la escalada de violencia.
En un comunicado, el Consejo de Seguridad pidió a las autoridades sirias "autorizar un acceso libre, total e inmediato del personal humanitario a todas las poblaciones que necesitan ser rescatadas".
El Consejo "deplora la situación humanitaria que se agrava rápidamente" en Siria, especialmente "en las regiones afectadas por los combates y la violencia como Homs, Hama, Dera e Idlib".
El Consejo también pide "a todas las partes involucradas en Siria, y en particular a las autoridades sirias, cooperar plenamente con Naciones Unidas y con las organizaciones humanitarias pertinentes para facilitar el suministro de ayuda humanitaria y permitir la evacuación de heridos de zonas afectadas" por la violencia.
La hiperactividad en el cerebro podría explicar los síntomas de la depresión
marzo 1, 2012 por maestroviejo